Adoptar un gato es una decisión que implica diferentes cambios en la dinámica del hogar que debes tener en cuenta. Sin embargo, los beneficios de tener un gato son múltiples y están comprobados tanto por la ciencia como por millones de dueños, quienes aseguran encontrar en estos felinos mucho más que una buena compañía.
A continuación conocerás todos los beneficios de tener un gato y hacerlo parte de tu hogar para vivir una experiencia con impacto positivo en muchos sentidos.
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Entre los beneficios de tener un gato, encontramos la capacidad sanadora para reducir el estrés de quienes lo rodean. Se ha comprobado científicamente, que acariciar un gato libera la famosa hormona del bienestar, llamada oxitocina, reduciendo de manera significativa los niveles de cortisol, la hormona del estrés.
Avalado por distintos estudios, la interacción continua de quienes comparten la vida con un gato, colabora a disminuir la presión arterial, teniendo hasta un 30% menos de posibilidades de sufrir un ataque al corazón o enfermedades cardiovasculares.
Como si fuera poco, hay una característica de este felino que resulta muy beneficiosa para quienes lo rodean. Se trata del ronroneo, éste no sólo es una expresión de satisfacción que tiene el gato, sino también un verdadero instrumento terapéutico.
La frecuencia vibratoria del ronroneo, posee propiedades curativas para los humanos que ayudan a fortalecer la estructura ósea, disminuir infecciones y agilizar la curación de tejidos.
El ronroneo, es una de las tantas muestras de cariño que tiene el gato hacia su dueño, como traer regalos, acurrucarse cercano a él o dar pequeños mordiscos. Según The cat Fanciers’ Association, estos comportamientos son una manera de marcar territorio frente a otros posibles gatos.
Sin lugar a dudas, el convivir con un gato trae un estado de calma cotidiano que logra contrarrestar el estrés que produce el acelerado estilo de vida moderno.
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Otro de los beneficios de tener un gato radica en su nivel de demanda de compañía, algo ideal para aquellas personas que viven en departamentos o trabajan muchas horas y quieren tener una mascota pero que no se comporte de manera invasiva.
Al igual que cualquier mascota, el gato requiere y espera cariño de sus dueños pero no lo hace de forma muy exigente y su lealtad sigue siendo inquebrantable. El gato, es un animal muy intuitivo y sabrá acompañarte con su sola presencia si te sientes mal o no has tenido un buen día.
Por estas razones, el gato también ayuda a mejorar la salud mental, dando a sus dueños un sentido de propósito y aligerando el sentimiento de soledad. El afecto y confianza que deposita el gato en su dueño genera más autoestima en este y crea un vínculo emocional fuerte que es poco usual con otras especies.
Los niños también se ven beneficiados ante la llegada de un gato al hogar por distintos motivos. Esto se debe no sólo a la noble compañía que brinda sino también a que aprenden sobre el respeto y cuidado de otro ser vivo, fomentando la paciencia y la inteligencia sensible.
Otro aliciente para adoptar este felino, habiendo pequeños en la casa, es que genera un impacto positivo no solo en la salud emocional de estos. Múltiples investigaciones indican que los niños que conviven con un gato son menos propensos a desarrollar en un futuro, alergias o asma puesto que el estar en contacto con los alérgenos del gato fortalece el sistema inmunológico.
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La alimentación equilibrada resulta fundamental para que tu gato pueda desarrollar una salud óptima y desplegar todo el potencial que trae su especie. Por eso, si valoras su compañía y quieres ofrecerle un verdadero cuidado, debes saber que su nutrición es la base de su salud.
Los alimentos balanceados de alta calidad no pueden obviarse ya que su organismo requiere determinados nutrientes en cantidades exactas como las proteínas, grasas, vitaminas, minerales y aminoácidos como la taurina, que permiten un sistema inmunológico fuerte y un corazón y visión saludable.
Una nutrición acorde, además, ayuda a mantener una piel sana y un pelaje suave y brillante y permite prevenir problemas comunes en los gatos dados por la mala alimentación, como la obesidad o las enfermedades del tracto urinario.
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El gato ayuda a reducir la ansiedad interactuando de manera táctil, por medio de las caricias y por su ronroneo, un gran reductor natural de la frecuencia cardíaca para su dueño. También, los gatos ayudan a reducir la ansiedad por el hecho de su sola presencia constante pero pausada, que busca cierta prescindencia e invita a relajarse.
Los gatos son animales muy limpios que pasan gran parte del día esmerandose en su aseo, por lo que no se llevan bien con la suciedad y el desorden.
Para mantener la higiene de tu hogar, simplemente procura cepillarlos regularmente para disminuir la caída del pelo, asegúrate de que mantengan una dieta balanceada para el buen funcionamiento de su sistema digestivo y provee de una caja de arena limpia para que puedan realizar allí sus deposiciones.
Una buena alimentación consiste en alimentos balanceados que contengan en su fórmula nutrientes de origen animal, como los ácidos grasos Omega-3 y Omega-6, la taurina y una correcta mezcla de fibras.
La óptima nutrición contribuye, a un sistema inmunológico fuerte, una buena salud de la piel, así como a evitar las bolas de pelo, entre otros beneficios, que hacen a una saludable vida diaria del gato.
Este artículo tiene una finalidad informativa y no debe interpretarse como asesoramiento para el cuidado de tu mascota. Ante cualquier duda acerca de la salud de tu mascota, lo mejor es consultar a un veterinario calificado.
