Los niños esperan con emoción y ansias la llegada de la nueva mascota a la casa y ni bien la ven, por supuesto, quieren agarrarla. Si se trata de un gato adulto, éste sabrá mantener la distancia pero esto no será posible con los gatitos recién nacidos.
Lo primero que hay que explicarle a los niños es que los gatos, ya sean pequeños o grandes, no son juguetes y que hay que tratarlos con mucho cuidado, que necesitan de ciertos momentos de tranquilidad y una zona donde puedan descansar y comer. Se debe elegir una zona de la casa donde colocar su plato de comida para gatos Nutribon y su cama. En otro sector se le debe poner el arenero para que el gatito sepa donde hacer sus necesidades.
Todo será un proceso de aprendizaje para todos los integrantes de la familia, ya que entre todos deben trabajar en equipo para ofrecerles un lugar acogedor al nuevo integrante de la casa.
Es importante que cuando llegue el nuevo integrante a la casa, los niños se sienten en el piso y sea el gatito el que se acerque primero a ellos. Con la mano bien abierta por debajo de la panza es la mejor manera de levantar al gato, y con la otra mano se sostienen los miembros posteriores.
Hay que enseñarles a los niños a no apretar muy fuerte al gato cuando lo abrazan y a no tirar nunca de su cola. Otro punto importante para que el gato pueda crecer de forma saludable es que nunca deben ser despertados en su momento de descanso.
Con mucho cuidado y paciencia entre todos podrán darle al gatito todo lo que necesita en el hogar.
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